PROVERBIOS
El hijo sabio es la alegría de su padre, el hijo necio entristece a su madre.
El hijo sabio es aquel que sabe tomar decisiones correctas y de esta manera honrar a su padre y a su madre, el hijo sabio sabe elegir el camino del bien porque sabe que ese camino lo llevará al éxito y de esta manera será el orgullo de sus padres. Nuestros padres nos enseñan el mejor camino y nos dan la orientación para poder seguir los ejemplos de Jesucristo, pero el hijo necio por mas que se le aconseje nunca cambiara y seguirá cometiendo los mismos errores y no podrá tener éxito en su vida.
Yahvhe no permite que el justo pase hambre,
Pero rechaza la codicia de los malos.
Dios siempre nos va ayudar en todo momento, nunca nos dejará solos porque es un padre amoroso, comprensivo, paciente, pero el también nos pide humildad y solidaridad con los mas necesitados. Por eso Dios no quiere a las personas que solo buscan el bien personal y no les importa las necesidades de las personas que los rodean. Busquemos siempre ser humildes y sencillos para poder tener la ayuda de Dios en todas las cosas que realicemos.
El recuerdo del justo sirve de bendición,
El nombre de los malos se pudre.
Si buscamos hacer las cosas bien y sembrar la semilla de Cristo en las personas que nos rodean siempre seremos recordados como personas integras, capaces de dar un ejemplo de bien y de cambiar a las personas por medio de nuestro testimonio, pero si durante el transcurso de nuestra de vida hacemos cosas que no hablan bien de nosotros nuestro nombre y nuestro recuerdo se irán borrando de las mentes de las personas porque no dejamos una semilla que de frutos buenos con el tiempo.
Bendiciones sobre la cabeza del justo,
Pero la boca de los impíos rezuma violencia.
Dios siempre derramará bendiciones sobre las personas que hacen bien las cosas, que buscan siempre el bien común y que ayudan a los demás en momentos duros de la vida, Dios siempre busca que todas las personas hagan su voluntad pero hay muchas que dejan la riqueza que solo Cristo les puede dar por cosas materiales que les da el mundo. Las personas que no hacen el bien Dios las castiga y les hace entender de una manera dura el error que cometen y que no es el camino que el les trazo.
El sensato de corazón acepta los mandatos,
El hombre charlatán corre a su ruina.
Si nosotros como hijos de Dios hacemos siempre la voluntad de Él y cumplimos sus mandatos, nos bendecirá de tal manera que comprenderemos el poder de Dios en nuestras vidas y siempre estaremos agradecidos y glorificaremos su nombre. Pero si escuchamos los mandatos que Dios no hace no llegaremos lejos y llegaremos a la ruina y a la desolación por nuestra necedad en no escuchar la voz de Dios que nos dice a cada momento que el es el camino, la verdad y la vida.
Los labios del justo apacientan a muchos,
Los insensatos muren en su falta de seso.
Nosotros debemos buscar tener labios de justo porque hay tanta persona que por no tener un consejo sabio y lleno de Dios hace con su vida lo que le plazca alejándose cada vez mas y mas de la presencia de Dios pero los que no buscan la iluminación divina mueren sin poder haber ayudado a cambiar la ideología errónea de una persona.
El temor de Yahveh prolonga los días
Los años de los malos son acortados.
Busquemos hacer siempre la voluntad de Dios, obedecerle en sus mandatos y cumplir sus mandamientos que de esa manera le demostramos el amor que le tenemos y al mismo tiempo el temor y el respeto que se merece, y Él nos premiará alargando nuestras vidas y llenándolas de bendiciones y alegrías. Al no temerle a Dios el nos adelantará el juicio para que nos demos cuenta por el mal camino que andábamos.
A los rectos su integridad les guía,
A los pérfidos les arruina su perversidad.
Las personas que buscan hacer bien las cosas siempre, estarán en el buen camino, el camino que los llevará al éxito y a la paz con Jesús, a las personas que no hacen bien las cosas y que andar por el mal camino su perversidad los llevará a su ruina y terminarán fracasando en todo lo que se propongan, porque al que obra mal termina mal por su falta de discernimiento para seguir adelante.
Nada servirán riquezas el día de la ira,
Mas la justicia libra de la muerte.
Al final de los tiempos en el día del juicio final de nada nos servirá el poder que tengamos en la tierra porque Dios nos juzgará a todos por igual y de toda la riqueza que tengamos nada nos llevaremos porque las cosas materiales se acaban pero el amor de Dios es para siempre y no nos dejara caer jamás y nos sostendrá si durante nuestra vida realizamos las cosas conforme el lo dejo estipulado.
A los rectos les salva su justicia,
Los pérfidos en su codicia son atrapados.
A la hora de la segunda venida de nuestro Señor Jesucristo solo las personas que durante toda su vida hicieron las cosas de una manera justa, equitativa, sincera y amorosa las salvara del fuego del infierno y las tendrá en su gloria junto con Él porque si buscamos hacer el bien a nuestro prójimo estamos haciendo la voluntad del padre. Las personas que no buscaron hacer el bien en su vida y se dedicaron a seguir al mundo y a aceptar sus tentaciones Dios las mandará al infierno para que se consuman en el fuego eterno.
El justo es librado de la angustia,
Y el malo viene a ocupar su lugar.
La persona que busca verdaderamente a Dios será probada para medir su fe, pero será por un periodo relativamente coro de su vida, y así Dios premiara esa constancia tanto en lo bueno de su vida como en los momentos difíciles, y la persona que no logra pasar la prueba es porque no busca a Dios y que no esta completamente segura de seguirlo y de aceptar sus mandatos entonces esta persona se mantendrá en angustia el resto de su vida por no poder superar su prueba de fe.
El pueblo maldice al que acapara el trigo,
Bendición para la cabeza del que vende.
Debemos buscar ser siempre generosos con todo lo que tenemos para poder ayudar a las personas que lo necesitan verdaderamente, porque si dios nos a bendecido con la abundancia de las cosas no espera que no lo quedemos sino que compartamos con todas las personas que tienen una necesidad, ya que si no compartimos de lo que tenemos Dios castiga el egoísmo y la mala fe. Dios nos quitará la abundancia que nos a dado porque no supimos compartir las bendiciones que el nos da.
El alma generosa será colmada,
Y el que sacia a otro la sed, también será saciado.
Así como damos recibimos si nosotros damos de manera generosa todo lo que Dios ha dado Él nos dará el doble de lo que tenemos y seguirá aumentando las bendiciones para nosotros. Debemos buscar siempre ser generosos porque no somos los únicos que necesitan de la bendición y esa hay que repartirla entre toda su creación y al ser generosos en todo sentido nos premiara cada día mas y mas por no ser avaros y en el momento que necesitemos de algo o de alguien nuestras buenas acciones nos salvaran.
Quien busca el bien, se procura favor,
Quien va tras el mal, le saldrá al encuentro.
Si buscamos hacer el bien, cosas buenas vendrán siempre hacia nosotros porque Dios premia las buenas acciones y así nos damos cuenta que vamos por buen camino al seguir el ejemplo de Jesucristo siempre hizo todo bien y fue exaltado al momento de regresar a su reino. El que hace las cosas mal y busca hacer el mas a las demás personas siempre le ira mal porque el mal sembró el mal cosecho y Dios lo castigará por no cumplir sus mandatos.
Los labios sinceros permanecen por siempre
La lengua mentirosa dura un instante.
Al hablar con la verdad esta durará por siempre ya que tenemos actos o testigos que nos respalden y así las personas confiarán en nuestros labios que proclamarán siempre el bien y la verdad pero la lengua mentirosa no dura porque la verdad llega tarde o temprano y la persona mentirosa es odiada por las personas que la rodean porque la mentira trae problemas e injusticias que repercuten en la vida de las personas y esto conlleva a generar enemistades. Dios siempre nos exhorta a que hablemos con la verdad porque la mentira es un pecado y no cumplimos la voluntad de Dios en los 10 mandamientos.
El que habla sin tino, hiere como espada,
Mas la lengua de los sabios cura.
Cuando hablamos por habar sin pensar en las consecuencias de nuestras palabras podemos dañar a las personas porque no son palabras sabias que les traigan paz, al contrario generamos mas problemas, dudas y desconfianza. Debemos saber las consecuencias que traen nuestras palabras y nuestros consejos porque podemos dañar a personas que necesitan nuestra ayuda. Demos siempre consejos sanos que les traigan paz a todos y que llenen de vida y de ilusión las mentes y los corazones de quienes nos piden ayuda.
El hijo sabio atiende a la instrucción de su padre,
El arrogante no escucha la represión.
El hijo siempre tiene que escuchar y hacer lo que le manda su padre, no solo por ser su padre sino porque tiene mas experiencia de las cosa y además por el simple hecho de ser nuestro padre merece respeto, y que se le honre en cada etapa de nuestra vida aun cuando seamos mayores, si sabemos escuchar los consejos de nuestros padres llegaremos lejos y alcanzaremos el éxito pero si no escuchamos ni honramos a nuestros padres nuestro camino será el de la inseguridad y la desolación.
La luz de los justos alegremente luce,
La lámpara de los malos se apaga.
La luz en nuestra vida en Dios y si somos justos y hacemos las cosas como Dios manda y cumplimos sus mandatos siempre estará con nosotros esa luz que ilumina nuestro camino y nos guía por el sendero de la verdad y de la paz, pero si no tenemos a Dios en nuestra vida esa luz no brillara por mucho tiempo y nos perderemos en un mundo dominado por el mal y que solo traerá para nosotros amargura y soledad porque Dios no esta en nuestra vida dándonos la luz que nos guía por el buen camino.
La casa de los malos será destruida,
La tienda de los rectos florecerá.
Al levantar nuestra casa sobre roca nuestra casa será tan fuerte que ni el viento mas fuerte la podrá tirar, porque esa roca es Dios que nos socorre en cualquier momento de nuestra vida pero si construimos nuestra casa sobre la arena se destruirá porque Dios no esta con ellos y su perdición se ara cada vez mas grande porque no esta construida su casa sobre la roca. Dios siempre debe ser el centro de nuestra vida y de todo lo que hagamos ya que el es sabio y sobre todo es Dios y sabrá guiarnos en nuestras decisiones.
Mas vale poco con justicia,
Que mucha renta sin equidad.
Si logramos tener éxito en nuestra vida, que ese éxito se halla logrado por el camino justo y leal porque si no es así no tendríamos nada de igual manera porque seria un triunfo falso y logrado a base de mentiras. Mejor es tener poco, pero ese poco lo valoramos más porque nos ha costado tenerlo y lo hemos obtenido con el sudor de nuestra frente y lo valoraremos más porque hay una parte de nosotros en ese éxito. Es mejor tener poco pero de la manera correcta que mucho de la manera incorrecta.
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